El Gran Diseño en el mundo Teatral

 

El Gran Gatsby es una obra conocida y vistosa.

Me encontraba caminando sobre las tablas del Gran Teatro Nacional de mi país (Rep.Dom.) y pensaba en el honor de estar en ese escenario donde se pararon grandes del teatro y la música. Personajes con tanto talento y preparación que me daba apuro pisar ese suelo y sin embargo, estaba allí, recibiendo aplausos de amigos, familiares y desconocidos tras estrenar una obra que me había enamorado: “El Gran Gatsby” de Fits Gerald.

Los aplausos eran por mi participación como actriz secundaria (mi primer papel importante), pero mi orgullo era doble porque había trabajado también en el diseño de la campaña promocional, dirección de la sesión de fotos, diagramación del folleto de manos y algunos elementos de la escenografía. Estaba viviendo un sueño multifacético y a todo color.

En ningún otro ambiente he visto tantas formas de artes fundirse. Desde el maquillaje de época, los personajes, la iluminación, el vestuario, escenografía (¡Dios mío, el ArtDeco!), la música, las coreografías, hasta el punto final de un buen guión. Quedó en mis manos el reto de graficarlo todo en un solo arte promocional y amé resultado.

Así comenzó una larga lista de proyectos relacionados al teatro musical (actuación y la dirección grafica). Debo admitir que es uno de mis temas favoritos para trabajar y me inspira enormemente conceptualizar y graficar buenas historias del teatro clásico y musical. Ahora entiendo porqué los fanáticos del teatro no imaginan sus historias favoritas sin el sello distintivo del cartel o logo que los identifica. Pienso en esos diseñadores que hicieron historia y muero por poner mis manos en le próximo proyecto del que pueda ser parte en más de una dimensión.

Gracias a los directores de teatro en mi país. Sobretodo a mi amigo y mentor Luis Marcell Ricart por dejarme graficar sus sueños, y a Carlos Espinal, Cecilia García y Guillermo Cordero por confiarme sus proyectos gráficos.